Andrea Juliana Enciso (1979)

Andrea Juliana Enciso, escritora colombiana

 

Nacida en Bogotá en 1979, Andrea Juliana Enciso se presenta como una polifacética creadora, fusionando su labor como poeta, ensayista, narradora e investigadora. Su bagaje académico, respaldado por un PhD en Lenguas y Literatura Hispánica de la Universidad de Pittsburgh, se entrelaza con su rica producción literaria.

Obra Publicada:

Andrea Juliana Enciso ha dejado su impronta en la escena literaria con la publicación de cuatro poemarios: "Laberíntica" en 2000, "Panóptico: Pabellón para tercos y fantasmas" en 2005, Derivas de la piel (2020), Diario de las dos voces (2024). Su capacidad para tejer palabras y construir mundos poéticos ha sido reconocida tanto a nivel nacional como internacional.

Antologías y Reconocimientos:

Sus escritos han encontrado espacio en relevantes antologías, incluyendo "Conjuro capital poetas bogotanos" en 2008 y "Todo boca abajo antología Latinale 2018" en 2019. Estos reconocimientos subrayan su contribución significativa al panorama literario contemporáneo.

Docencia y Vida en el Caribe Colombiano:

Actualmente, Andrea Juliana Enciso comparte su pasión por la literatura como docente en la Universidad del Norte en Barranquilla, sumando una perspectiva única a la escena literaria del Caribe colombiano.

Algunos Poemas:

"Una tarde en el 61C":

En este poema, el transporte público se convierte en un pedazo de ámbar flotando en el octubre gris, donde los árboles dejan caer sus estrellas. La estructura ósea de la nostalgia se entrelaza con la escena del pasado, conectando con la memoria del patio de la abuela.

"Ajenos a la materia":

Andrea observa a hombres ajenos a la realidad, sumidos en sus pequeñas ideas luminosas, pero incapaces de conectarse entre sí. La soledad de estos hombres se asemeja a manglares desolados después del embate del mar, revelando una tristeza iracunda.

Estos versos extraídos de "Derivas de la Piel" (Editorial Mackandal, 2020) ofrecen un vistazo a la poesía de Andrea Juliana Enciso, donde las palabras no solo expresan, sino que también exploran los laberintos y panópticos de la vida y la identidad. Su obra, arraigada en la riqueza del Caribe colombiano, se erige como un testimonio literario que trasciende fronteras.

Una tarde en el 61C

Arces.
Sicomoros.
Gingkos.
Los árboles dejan caer sus estrellas.
El bus es un pedazo de ámbar
flotando sobre el gris primigenio de octubre.
En este puesto anidan
rezagos de bestias triásicas,
Una maría mulata.
Un loro.
Un caporo.
Ruborizada por la calefacción
me sorprende lo poco que he cambiado:
mi nostalgia tiene la estructura ósea
del patio de mi abuela.

(Inédito)

Ajenos a la materia

Hablan de sus pequeñas ideas luminosas
y no se miran a los ojos.
Plinio revisa el teléfono,
David limpia sus Ray-Ban,
Sebastián habla
como si el pedazo del ahora
le perteneciera solo a él.
A estos hombres
se les extinguen las raíces
y se quedan tristes,
solos, iracundos
como manglares
después del mar de leva.
Al final de la jornada
hastiados de su importancia,
Plinio, Sebastián, David, Pedro
se van a sus casas
y en la profundidad de su orilla
sin tierra, sin agua, sin filamentos
están tan solos
que ni siquiera pueden estar con ellos mismos.

(Del libro: Derivas de la Piel (Editorial Mackandal, 2020).

¡Libertad... para pensar!