María Clara González (1952)
María Clara González, escritora colombiana
María Clara González De Urbina, nacida en 1952, es una destacada poeta, ensayista y traductora colombiana. Con una formación en Estudios Literarios de la Pontificia Universidad Javeriana de Bogotá, ha contribuido significativamente al panorama literario nacional e internacional.
Obra Poética:
A lo largo de su carrera, María Clara ha publicado siete libros de poesía, cada uno una exploración única de las emociones y experiencias humanas. Entre ellos, destacan obras como "No era un viernes" (2014), "Habitar un umbral" (2013), "Eternidad visible" (2008) y "Pasajeros del viento" (1996). Su habilidad para tejer palabras revela una sensibilidad poética que captura la esencia de la existencia.
Ensayos Literarios:
María Clara González De Urbina también ha incursionado en el ensayo literario, aportando análisis críticos valiosos a la academia. Entre sus ensayos se encuentran "Tradición zapoteca: Irma Pineda Santiago y Natalia Toledo Paz" (2018) y "Análisis imagológico de ‘Álbum de billetera’ de Rodrigo Parra Sandoval" (2017). Estos ensayos demuestran su capacidad para explorar diversos aspectos literarios con profundidad y perspicacia.
Reconocimientos y Logros:
Su excelencia en la poesía le ha valido nominaciones y reconocimientos notables. Fue nominada al Premio Internacional de poesía en el Festival International “Curtea de Argeş Poetry Nights” en Rumania en 2017. Además, fue finalista en el Undécimo Certamen Internacional de Poesía Buenos Aires en 2012 y recibió una mención de honor en el concurso Oxford Center/Unión Nacional de Escritores en Bogotá en 1997.
Conclusión:
María Clara González De Urbina, con su pluma elocuente, ha dejado una huella indeleble en la literatura colombiana y más allá. Su habilidad para fusionar la poesía y el ensayo demuestra su versatilidad y profundo compromiso con el arte y la expresión literaria. Su obra continúa resonando en los corazones de aquellos que se sumergen en sus palabras, invitándolos a explorar las complejidades de la vida a través de la lente de la poesía y la reflexión crítica.
Nombrar la ausencia
Hay ausencias que se aprenden a nombrar
como la infancia
o el aroma del pan recién horneado
Se deletrean ausencias de amigos que se marchan
de caminos que alguna vez se transitaron juntos
Se tejen las ausencias en tardes de llovizna
mientras se escuchan las historias del abuelo
Hay ausencias que marcan la existencia
–desde siempre–
como de padre muerto
Hay ausencias que se trenzan con los años
y un día cualquiera recordamos
con ternura de mar que se silencia
Pero nombrar su ausencia
¡Es imposible!
Habita mi universo
y aunque jamas lo nombre
la palabra ausencia
se ocultaría aprehensiva
cuando intente llamarla
para hablar de nosotros
Súplica
Por hoy
dame la mano
para engañarme
Dame tu cuerpo
para saciar mi sed
Por hoy
sólo por hoy
enséñame a mentir
como te mientes
cuando repites
que únicamente el vuelo
de un ave migratoria
te une a mí.
¡Libertad... para pensar!
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