Divagaciones femeninas


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  • ¿Volverías a enamorarte de mí si la vida nos diera la oportunidad de reencontrarnos sin un pasado en común?
  • Creo que no.
  • ¿Por qué? Solías llamarme el amor de tu vida. Dudabas de encontrar a un tipo igual ¿Qué pasó con ese sentimiento?
  • Lo dejé en el pasado a donde pertenece.
  • Eso no responde la pregunta.
  • Responde la última que formulaste. La respuesta a la primera no tiene razón de ser …
  • Igual, quiero escucharla.
  • Si no interrumpes me será más fácil hacerlo.
  • Ahora te complicas.  Es tan difícil ¿debes dar vueltas y pensar demasiado? Todo este titubear ¿significa que me odias y te molesta mi recuerdo?
  • Te tragaste la mitad del océano en una sorbida.
  • ¿Me trague la mitad de qué? Tú y tus malditas exageraciones. Sólo te hago una pregunta y te pasas de lista.
  • Para ser exactos has planteado tres preguntas: ¿por qué no te querría otra vez? ¿Qué pasó con el sentimiento? y la más grave que no formulas pero aparece implícita: ¿Qué ha pasado conmigo?  Con tu salida de tono creaste dos más.
  • Uuufffff. Eres campeona. Por dios, mujer ¿A qué viene todo esto?
  • Ya sabes, me gusta la precisión.
  • Lo que te gusta es joderme. Llevarme al límite. Sentir que me hierve la sangre, ver mis ojos inyectados de ella, y justo antes de que te mande a la mierda salir con una de las tuyas: “ya está bien, no es para tanto” ¿Por qué no tiene sentido mi pregunta?
  • Porque asumes que la vida no cambia, o que nosotros permanecemos incólumes, piezas fijas, en un escenario hostil y en movimiento. Tu pregunta no tiene razón de ser porque pretendes justificar el futuro con una experiencia pasada, lo que representa, en tu caso, una clara desventaja. Si coincidiéramos en el futuro sin recuerdos mutuos yo no sabría quién eres tú, ni quién era yo mientras te quería. Ahí está la trampa. Si los dos ignoráramos nuestras miserias tendríamos experiencias similares a las ya vividas y posiblemente volveríamos a cometer los mismos errores. No te volvería a querer porque no te recuerdo. Serías otro amor, uno nuevo. Si, por el contrario, te interesa saber si aún guardando un vago recuerdo de tu existencia caería otra vez bajo tu hechizo, es otro cuento.
  • ¿Qué pasaría en ese caso?
  • ¿Por qué asumes que repetiría mi vida contigo si tengo la oportunidad de conocer a otro hombre?
  • Por lo que siempre dijiste, que nadie te hacía sentir como yo, que era el único que había logrado derribar tus barreras.  Por todo lo bueno que vivimos.
  • El amor es eterno mientras dura. Eras el único en ese momento y lugar. Hemos pasado a otra cosa.
  • Esa verborrea analítica no te ha servido para nada práctico o ¿Puedes asegurar lo contrario?
  • ¿Tú qué piensas?
  • La pregunta va en otra dirección.
  • Resiento tus preguntas, tu continua búsqueda de razones aún desconocidas para el interrogado.
  • ¿Cuál es la respuesta?
  • Ya te contesté
  • Podrías sólo dármela en términos de sí o no
  • Quieres la contundencia de los monosílabos
  • Sí
  • No, no volvería a quererte.
  • Era sencillo ¿No lo crees así?


¡Libertad... para pensar!


Comentarios

  1. Me gustó este diálogo intimista y con ritmo cinematográfico, como siempre reflexivo y psicológico donde podemos identificarnos y ser protagonistas en relato... Un abrazo.

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    1. Gracias, Graciela. Con este diálogo he querido divertirme un rato pensando en discusiones absurdas y en las preguntas que las suscitan. Espero lo hayas disfrutado. Gracias por pasarte

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  2. Tramposa. Si te propusiste marcarte un tanto en tu teoría de que no existe el amor eterno, que sepas que has hecho trampa asfixiando la magia de lo inexplicable, en el lenguaje conciso y en hipótesis que no se van a dar. No vale!!

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    1. Jajajaja, ufff, bien, mi personaje tendrá en cuenta tus opiniones. Comprenderás que no puede contestarte; pero me ha autorizado para hablar en su nombre. Ella y él han caído en un juego perverso que trata de poner al otro fuera de lugar. Él tiene razón cuando afirma que ella quiere joderlo. Cada una de las afirmaciones hechas tiene ese fin: exasperar. Es un vago intento de hablar con cierta propiedad y elocuencia sobre cosas que poco sabemos y que por tanto no dominamos. La magia de lo inexplicable sigue intacta por mucho que ella se esfuerce en hablar con lógica.

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  3. Me encanta la dinámica del diálogo. Me ha llevado al principio, pues a través de preguntas sin respuestas y evasivas inexplicables, llegamos al inicio, a ese "no" tab rotundo, Un monosílabo contundente y a lo mejor cierra el círculo. Excelente mi querida niña.
    Muchos besos

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    1. Gracias, Amparo. Me alegra que te haya gustado éste diálogo. Es un juego y como tal es muy posible que el "no" contundente no cierre el ciclo. Saludos.

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  4. Hola María Eugenia. Me ha encantado este dialogo. Un buen ejemplo de lo absurdo de algunos comportamientos en una pareja...
    Buena semana y saludos.

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    1. Hola, Eric. gracias. Tienes razón al catalogar el diálogo de absurdo. Sin duda las parejas nos enfrentamos por cuestiones a veces inexplicables. Saludos

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  5. ¡El relato es interesante y muchas personas lo han vivido, eso no significa que uno no pueda volver con el Amor de su vida, a pesar de las diferencias uno mismo reconoce los errores vividos y los transforma en esperiencia y sabiduría, nadie es perfecto y no hay mejor remedio que el perdón! ¡¡Excelente reflexión, te mando un beso inmenso!!!

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    1. Seguro, Damian. Creo tanto como tu en el poder del amor y el perdón; en los sueños de intemporalidad que nos relacionan con una persona en concreto, en quien reconocemos a nuestro amor eterno. Gracias por comentar. Saludos

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  6. Jajaja me has hecho sonreír ...y pensar ¡Claro que todo cambia!
    A veces pienso que si no quieres saber ¿para que preguntas?

    Un abrazo Maria Eugenia

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    1. Jajajajaja, si, en casos como estos y conociendo a tu pareja es mejor no preguntar o soñar que todas las respuestas son positivas. Gracias, Antonio

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