Akiko Yosano (1878 - 1942)

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Akiko Yosano, poeta japonesa

Akiko Yosano (与謝野 晶子) fue una destacada poetisa, escritora y feminista japonesa nacida el 7 de diciembre de 1878 en Sakai, Prefectura de Osaka, Japón, y fallecida el 29 de mayo de 1942 en Tokio. Es conocida por su prolífica obra poética y su activismo en favor de los derechos de las mujeres.

Yosano creció en una época de transformaciones en Japón, marcada por la modernización y occidentalización del país durante la Era Meiji. Desde joven mostró un talento notable para la poesía, y a los diecisiete años publicó su primer libro de poemas, titulado "Tangled Hair" (Mezcla de cabellos, 1901), el cual atrajo la atención del público y la crítica.

Su poesía se caracterizaba por su sinceridad, emotividad y un estilo lírico que exploraba temas como el amor, la naturaleza y la condición humana. Su obra reflejaba también su preocupación por las cuestiones sociales y políticas de su tiempo, así como su apoyo a los derechos de las mujeres y la igualdad de género.

Además de su labor como poetisa, Yosano fue una reconocida ensayista y novelista. Es especialmente célebre por su traducción y adaptación de "Genji Monogatari" (La historia de Genji), una de las obras más importantes de la literatura japonesa clásica, al japonés moderno.

Yosano también desempeñó un papel destacado en el movimiento feminista de Japón, abogando por la educación y la emancipación de las mujeres. Fundó la revista "Seito" (Voz de la Mujer) en 1911, que se convirtió en una plataforma importante para las escritoras feministas de la época y un espacio para discutir temas de género y derechos de la mujer.

A lo largo de su vida, Yosano desafió las convenciones sociales de su tiempo y luchó por la igualdad y la justicia. Su legado perdura en su vasta obra literaria, su activismo feminista y su influencia en la cultura japonesa moderna.

Obras destacadas de Akiko Yosano incluyen:
  1. "Tangled Hair" (Mezcla de cabellos, 1901)
  2. "Midaregami" (Desorden de cabellos, 1901)
  3. "Yosano Tekkan to sono fuufu" (Yosano Tekkan y su familia, 1910)
  4. "Yume no sekai" (El mundo de los sueños, 1911)
  5. "Shin'yaku Genji Monogatari" (Una nueva traducción de La historia de Genji, 1939)

Akiko Yosano es recordada como una figura icónica en la literatura japonesa y una pionera en la lucha por los derechos de las mujeres en su país. Su valioso legado literario y su activismo continúan inspirando a generaciones de escritores y feministas en todo el mundo. 

No te mueras

Ay, hermano, lloro por ti,
no te mueras.
Tú que naciste el menor de la familia,
el cariño de tus padres superaba todo,
mas ¿acaso ellos te han educado para matar a la gente
haciéndote empuñar una espada?
¿Te han criado hasta los veinticuatro años
para que mueras después de matar a la gente?

Eres el dueño de una tienda tradicional
de un comerciante de la ciudad de Sakai.
Eres el heredero del nombre de tu padre.
No te mueras.
¿Qué te importa si el Castillo de Puerto Arturo
cae o no cae?
Sólo conoces las costumbres de una familia de
mercaderes.

No te mueras.
El Emperador nunca aparecerá en el campo de batalla.
“Que mueran como bestias,
que derramen mutuamente sangre humana,
que es el honor del hombre el morir”
¿Pensará así el Emperador?
No creo, pues tiene una benevolencia profunda.

Ay, hermano,
no te mueras en el campo de batalla.
A tu madre que había perdido al esposo
le han quitado a su hijo
en medio del llanto sin misericordia
el otoño pasado.
Ella mantiene a su familia y
mientras se habla de la paz nacional
aumentan las canas de su cabello.

¿Acaso te has olvidado
de tu mujer joven y frágil
que a la sombra de la cortina
llora inclinada,
con quien no has vivido ni diez meses?
Piensa en el dolor de la joven.
Ay, ¿en quién podría ella apoyarse
sino en ti, el único en este mundo para ella.

Tú no te mueras.

Una noche

En cada cuarto,
en cada jarrón,
enciende una brillante luz;
arregla amapolas y rosas.
Esto no es consolar
sino castigar;
porque aquí, una mujer
—olvidada de alabar
y de responder—,
de pronto deseó llorar
por una nimiedad.

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TANKAS

Sin conocer
la sangre ardiente
de un cuerpo tierno,
¿no te sentirás solo,
tú que predicas el camino?

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La primavera es fugaz.
¿Qué me importa una vida inmortal?
Toqué
con las manos
mis senos abundantes.

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En Kamakura
aunque sea un Buda
Shakyamuni
es guapo.
Una arboleda de verano.

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Hacia Kiyomizu
la noche de luna y de cerezo
atravesaba Guion.
Toda la gente bajo la luna
¡Se veía tan hermosa!

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La joven veinteañera.
Fluye entre los dientes del peine
su cabellera negra.
La ostentosa juventud,
¡oh, maravilla!

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La campana del templo
suena leve esta tarde…
¡Ven ahora y entona los sutras
en estas flores de melocotón
que se abren en mi pelo!

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Aquí y ahora
cuando me paro a recordar
mi pasión, me parece
que yo era como un ciego
que no teme la oscuridad.

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Esa joven en sus veinte,
A través del peine
su cabellera negra
el orgullo de la primavera
¡tanta belleza!

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La primavera es corta,
¿Quieres sentir la eternidad?,
Le dije,
Y, tomando sus manos,
las hundí entre mis poderosos pechos

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Aunque suelto en el agua
mi largo pelo de cinco “shakus“,
mis sentimientos de mujer
permanecen secretos,
retenidos ...

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Dos estrellas en el cielo
susurros de amor
tras la cortina de la noche
mientras que abajo, ahora, las personas mienten
sus cabellos en suave desorden...

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Mañana, esta vez mañana
No estarás conmigo...
Me apoyé contra la puerta de la pensión, débil
Como oscurecerán las flores del ciruelo
Delante de mis ojos. 

Un pájaro viene
delicadamente como una niña
a bañarse
a la sombra de mi árbol
en un charco de otoño.

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El dia que las montañas se mueven ha llegado.
Aunque lo diga, nadie me cree.
Las montañas, que en otro tiempo fueron activas
entre llamas, sólo duermen un rato.
Mas, aunque lo hayáis olvidado,
creedme, amigos, que todas las mujeres que dormían
ya se despiertan y se mueven.

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Viniste al fin, y por eso
dejé ir a las libélulas
que conservaba cautivas
entre mis cinco dedos
este atardecer de otoño.


Libertad... para pensar!

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