Horizonte Femenino

                                                                       Imagen de Kei Rothblack en Pixabay     Después de un ciclo la vida se interrumpe, crea una página en blanco, un salto en la memoria. Sigue una hoja tachada. ¿El porvenir, acaso? Trazamos una ruta en la mirada,  camino vacilante hacia los otros, y encontramos una calle sin salida. En cada ciclo el cuerpo clama, auxilio impronunciable. En cada ciclo el cuerpo no es refugio, es pozo, escombros, fortaleza, ancho cielo u hondonada. ¡Libertad... para pensar!

    Imagen de Foto-Rabe en Pixabay   Los días se desprenden de mis manos, marchitos se derrumban a mis pies,  fosas de barro. Hay un mañana en que los días vuelven sanos, recuperados del destierro del olvido,  parecen otros,  pero exudan un efluvio de recuerdos y se instalan a vivir sin esperanza.    ¡Libertad... para pensar!

    Imagen de congerdesign en Pixabay   El hilo de tu voz,  tu suave arrullo,  puede zurcir  mi corazón de madre, sensible a los cuchillos de tu ausencia.   No corta con cizaña quien te deja, no hay tal poder en mano que abandona.   El dolor se hace piel  y desde adentro la va cortando  porque ayer armó un incendio.   Busca salida el dolor que bien nos arde, y su fuego se resiste al cauto océano.   Al corazón  lo apuñaló el dolor post mortem, y yo clamo por tu voz,  tu suave arrullo,  que sabe ser ungüento,  cura, bálsamo,  que sabe ser la asepsia  de mi herida. ¡Libertad... para pensar!

      Las letras de mi nombre, llaves que abren el mundo, impresas en la tierra son camino, los pasos que dibujan mi agonía.   Sobre todas las cosas,  mi nombre, es otra piel del cuerpo, prisión y tiempo. Si persiste mi nombre en el futuro, ¿a quién llama si el cuerpo ya no existe? No dice de sí mismo,  es nombrado, y así devela el alma que se esconde.   ¡Libertad...para pensar!

                                                Imagen de ExposureToday en Pixabay   Tengo tus ojos y tu voz,  tu grave acento, los idiomas con que nombras mi patria que ahora es bastión,  tu nuevo enclave.   Tengo tu historia resumida, tres imágenes: la familia, el deporte, aquellos años. Tu estirpe majestuosa, tu legado y el balcón de Julieta en tu Verona.   Tengo tu amor  preservado en las estancias, es abono donde planto días grises, inviernos malogrados en los ojos y sueños que en la espera se suicidan.   Tengo añoranzas. ¡Libertad... para pensar!  

Maruja Vieria, escritora colombiana   Página de la autora   Maruja Vieira, nació en Manizales en 1922 y falleció en Santafé de Bogotá en el año 2023, es una figura destacada en la literatura colombiana, distinguiéndose como poeta, periodista, catedrática y ensayista. Miembro de Honor de la Academia Colombiana de la Lengua y Correspondiente Hispanoamericana de la Real Academia Española, su impacto abarca más de 20 libros de poesía, dos antologías, dos libros virtuales y una obra de prosa. Carrera Literaria y Contribuciones: Maruja Vieira inició su carrera literaria en 1946, publicando sus primeros poemas y artículos en el Suplemento Literario de El Tiempo. Su columna "Columna de Humo" en El Espectador y colaboraciones en diversos medios consolidaron su posición como testigo excepcional de la historia política y cultural colombiana. Compromiso Social y Docencia: Defensora de los derechos de la mujer, Vieira fue una gestora cultural y docente, dedicada a formar nuevas generacion

  Biografía Blanca Ortiz de Sánchez Montenegro, nacida en Tumaco en 1908 y fallecida en Bogotá en 1977, destacó como una figura literaria en Pasto y Bogotá, dejando un legado imperecedero con sus sólidos conocimientos literarios, la calidad de sus escritos y su inconfundible jovialidad. Su obra cumbre, "Diafanidad", un libro de poemas, se erige como un tributo a las diversas temáticas que coloreaban la vida en Tumaco y sus alrededores. A través de sus versos, Blanca Ortiz describió con maestría las personas, los paisajes de la costa y plasmó algunas de las entrañables costumbres de su amada isla. Aunque abandonó su ciudad natal a temprana edad, las experiencias y emociones vividas en Tumaco impregnaron su alma de por vida. "Diafanidad", editado en Bogotá en 1938, se erige posiblemente como el primer libro publicado por una mujer nariñense. En las décadas iniciales del siglo XX, otros poemas escritos por damas de la región se difundieron en diversas revistas del depa

María Mercedes Carranza (Poeta colombiana) Biografía: María Mercedes Carranza, poetisa y periodista colombiana, nació el 24 de mayo de 1945 en Bogotá y falleció el 11 de julio de 2003. Hija del poeta y diplomático Eduardo Carranza, vivió en Europa durante su juventud, interactuando con prominentes poetas de la época. Se graduó en Filosofía y Letras en la Universidad de los Andes. Ejerció el periodismo en El Siglo de Bogotá y El Pueblo de Cali, dirigiendo las páginas literarias Vanguardia y Estravagario junto a su esposo, Fernando Garavito. Fue jefe de redacción de la revista Nueva Frontera y, hasta su muerte, encabezó la crítica literaria en la revista Semana. Comprometida políticamente, respaldó a Luis Carlos Galán y participó en la Asamblea Nacional Constituyente de 1991. Dirigió la Casa de Poesía Silva desde 1986 hasta su fallecimiento, y lideró una campaña por la paz tras el secuestro de su hermano por las FARC. Cronología: 1945: Nace en Bogotá. 1951: Viaje a España con su familia.