Carolina Dávila (1982)

Carolina Dávila, escritora colombiana


Carolina Dávila: Poeta, Abogada y Defensora de los Derechos Humanos

Carolina Dávila, nacida en Bogotá, Colombia, en diciembre de 1982, es una destacada figura en el ámbito de la poesía contemporánea. Además de su brillante carrera como abogada feminista y su dedicación a la defensa de los derechos humanos, ha dejado una profunda huella en el mundo de las letras con su obra poética.

Carolina es magíster en Derechos Humanos y Democratización, así como aspirante a una maestría en Escritura Creativa. Su pasión por la escritura se ha plasmado en la publicación de varios libros de poesía, entre los que se destaca "Como las Catedrales", galardonado con el Premio de Literatura del Ministerio de Cultura de Colombia en 2010. Su segundo libro, "Variables de Riesgo", promete seguir cautivando a los lectores con su profundidad y sensibilidad poética.

La obra de Carolina Dávila ha trascendido fronteras, siendo traducida a varios idiomas como el inglés, italiano, portugués y árabe. Sus poemas han sido incluidos en diversas antologías poéticas tanto en Colombia como en el extranjero, consolidando su posición como una voz importante en la poesía contemporánea latinoamericana.

La poesía de Carolina Dávila aborda temas profundos y universales, desde la resistencia del cuerpo hasta la naturaleza efímera de la vida. Con un estilo poético único, combina imágenes evocadoras con una prosa cuidadosamente elaborada, creando un universo poético que invita a la reflexión y la introspección.

A través de su obra, Carolina Dávila ha logrado capturar la esencia de la experiencia humana, explorando la complejidad de las emociones y los desafíos de la existencia. Su contribución al mundo de las letras y su compromiso con la justicia social la convierten en una figura inspiradora para las generaciones presentes y futuras.

Los poemas seleccionados de "Variables de Riesgo" revelan la profunda sensibilidad de Carolina Dávila y su capacidad para explorar temas como la vulnerabilidad del cuerpo y la lucha por la supervivencia en un mundo hostil. A través de imágenes vívidas y metáforas poderosas, nos invita a reflexionar sobre la fragilidad y la resistencia del ser humano frente a las adversidades de la vida.

 
(De Variables de Riesgo)

[EL CUERPO, LA MURALLA]

Un ojo expresa su resistencia y se cierra
en la claridad del silencio
se confunde el tecleo con la taquicardia

El día es este atropello que pasa por el cuerpo
por el cansancio
y la postergación de los alimentos

el cuerpo puesto en medio
el cuerpo 
             barrera de contención
recibe los embates de la palabra
de las milimétricas negociaciones

para que nada cambie 
para que se mantenga en el límite
la realidad con su desgarro.


SOPORTA EN LA QUIETUD TODO SU PESO

Relegado al margen
no al “parque natural”
menos al valle abierto

Un cóndor perpetuado en el metal
lejos de la flexible carne de sus alas

El viento pasa
no él
Él permanece constante
metalúrgicamente inalterable

Pasan los turistas 
sin percatarse de la herrumbre
Posan, se recuestan, toman fotos
 -una cámara promedio
hecha para captar los simulacros-
no queda en ellas 
ninguna señal del deterioro

Los turistas suben a los coches
Pasa el viento
los autos y el polvo que levantan
Cóndores –por supuesto– no pasan.

TRES DÍAS  


    -en medio del estacionamiento- 
el cuerpo del pájaro
intacto 
no lo transforma
el desierto no la llanta 
ni hay huella como herida abierta

En el lugar del que vengo
las moscas lo toman todo
fundan su imperio
de malaria y dengue
y la sangre llama la sangre

No distinguimos vida y podredumbre
por eso la guerra y el carnaval
la risa y la canción en cada espacio 
que era de la rabia o la tristeza

Allá nunca un animal  
alcanzaría a consumirse desde dentro
nunca el rencor como 
músculo calcificado
como hueso que se atora

Acá, el pájaro
en su cama de plumas secas
sin reguero de sangre
sin la última seña
de su pálpito. 

ESTA HISTORIA COMIENZA CON UNA NECESIDAD DE HACERSE CARGO

arreglar las duchas de la casa
las fugas de agua
resolver el incremento en las cuentas de servicios públicos

Terminan en el baño ordenando cajones
Ella revisa la fecha de vencimiento de los medicamentos
frunce el ceño, desecha un par
A él le resulta sexy su exagerada preocupación
el miedo a una muerte de la que sin duda se enteraría
meses después

Con esta dinámica
le hacen el quite a lo importante
sientan las bases para un aséptico final.


¡Libertad... para pensar!

Comentarios

Entradas más populares de este blog

Historia del barrio Mojica (Cali-Colombia)

Debate Physis vs Nómos

Adela Zamudio (1854-1928)