Almari Albarenque Acosta (1960)

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Almari Albarenque Acosta, escritora uruguaya


Biografía

Almari Albarenque Acosta, nacida en Montevideo el 16 de junio de 1960, es una educadora uruguaya con especialización en la línea social y estudios en portugués.   Además de su trabajo como educadora, Almari es dramaturga, escritora y poeta, comprometida con la promoción de la literatura y la cultura afrodescendiente en Uruguay.

Como artista, participa activamente en la Red de Escritores y Creativos Afro (REDAFU) y coorganiza el Grupo de Literatura y Canto Afrouruguayo Herencia Africana. Ha sido parte de numerosos eventos culturales, incluyendo la Feria del Libro Espacio REDAFU en el LATU, el ciclo "Poemas con Aromas de Café" en la Casa Bertolt Brecht, y "Navidad de Jazmines" en la Casa de los Escritores en el Mercado Agrícola de Montevideo (MAM), actividades todas organizadas por "Libro sin Tapas". En septiembre de 2015, Almari estrenó su obra de teatro "Ecos de esclavitud", que refleja su compromiso con la historia y las experiencias de la comunidad afrodescendiente.

Como escritora, participa desde 2013 en el taller literario de Rubén Dalba en el MAM, y es promotora de escritores infantiles a través de "Libro sin Tapas", una iniciativa que busca fomentar la lectura y escritura entre los más jóvenes. Almari también ha trabajado en la promoción y presentación de la Feria del Libro Infantil en la Intendencia de Montevideo (IM), y ha sido delegada y expositora en el Encuentro Nacional de Educadores del Instituto del Niño y Adolescente del Uruguay (INAU). En 2012, creó el proyecto "Caja de Cuentos-Libro Infantil", una iniciativa que fue publicada por el INAU y que busca acercar la literatura a los niños a través de cuentos accesibles y significativos. Además, ha contribuido con su trabajo literario en diferentes libros colectivos.

Almari Albarenque Acosta proviene de una línea de mujeres afrodescendientes con historias de lucha y resiliencia. Se describe a sí misma como hija de Celeste, una empleada doméstica; nieta de América, quien trabajó como lavandera y planchadora; y bisnieta de Martina, una mujer que fue esclavizada y vivió hasta los 110 años, manteniendo todas sus facultades.  Esta herencia afrobrasileña ha influenciado profundamente su trabajo y compromiso con la visibilización y reivindicación de la cultura afro en Uruguay.

Poemas

Me fui

Tu contorno dibujé en la arena,
y las algas le pusieron vida
a tu cabellera.
Dos duras conchas fueron suficientes
para hundir mis dedos junto a ellas
e imaginarte pegadito a mi vientre.
Tus labios como pájaros dementes,
igualaron el canto que emitieron salvajes,
al hincarme tus dientes.
¡Y me fui, volé, e imaginé tenerte,
sintiéndote en el tacto de la arena caliente!
Y te amé, reí y sorprendí a la gente,
que me observaba cual si loca fuese,
moverme entre la arena enajenadamente


Cuando dieron las siete

Sobre la cabecera de la cama tintineaba un atrapa-sueños; por instantes suavemente. Era como si el viento de pronto apareciese con el simple objetivo de
hacerlo estremecer.  Sus suaves formas de colores fuertes, resplandecían en la
habitación celeste, regalando su luz y su energía a todo el entorno que las envolvía.
Las horas transcurrieron acompañadas permanentemente de sonidos tenues y
lentos, y de otros rápidos y potentes. Parecía a veces que el atrapa-sueños tuviese vida propia.
Tan solo cuando dieron las siete, las ventanas se abrieron saludando al amor,
pícaro duende, que entre las sábanas se había instalado sutilmente, para dar
movimiento al atrapa-sueños de la habitación celeste.


Presencia

Si estás conmigo río y deliro
te doy el alma en cada suspiro,
rozo tu pelvis con mis caderas,
y al encastrarnos, gozo la entrega.
Si estás ausente viajo demente
nadando sola contra corrientes,
cruzo las calles a contramano
volando alto, toco la muerte.


Presentimiento

Te veo llegar primavera
y mi ser está de fiesta.
La nueva savia me llama,
mis sentidos se entremezclan.
Embriagados fluyen, gozan,
gimen, ¡tocan tu esencia! ;
y cual animal en celo
al susurro de tu brisa
la hembra que te venera,
inicia el ciclo ancestral
al vibrar de sus caderas.



Tú me navegas de sur a norte
y a la magia de tu mástil
yo me entrego cada noche.
Porque te quiero y me quieres,
porque te siento y me sientes,
hagamos del amor, gala y derroche.

¡Libertad... para pensar!

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